You dont have javascript enabled! Please enable it! Autoaislamiento: sobre la fiebre de la cabina | Blog Eurodita

Durante esta época difícil de pandemia mundial, cada vez más personas encuentran formas de trabajar y vivir de forma remota. Las cabañas de madera a medida resultaron ser una gran solución para el autoaislamiento, especialmente en Europa y América del Norte. Ya sea que vengan en forma de casas de madera laminada completa, cabañas de madera estándar o como oficinas de jardin – Las cabañas de madera parecen ser una excelente manera de crear un espacio aislado. Pueden garantizar la privacidad, mejorar la productividad y la seguridad de los elementos relacionados con el trabajo.

Sin embargo, hay un tema que pocas fuentes cubren durante esta pandemia global: la fiebre de la cabina. Es un término que muchos de nosotros escuchamos, pero probablemente nunca hemos experimentado o encontrado. Por eso, en este post, en Eurodita decidimos presentarte la fiebre de cabina: qué es, cuáles son los síntomas y cómo llegó a llamarse así.

¿Qué es la fiebre de cabina?

En los términos más comúnmente aceptados, la fiebre de cabina es una irritabilidad o inquietud angustiosa y claustrofóbica que se provoca al estar atrapado en un lugar aislado durante largos períodos de tiempo. Los mejores ejemplos son los submarinos, el confinamiento solitario y las cabañas de madera remotas, de donde proviene el nombre. Se cree que el nombre proviene de personas que vivían en condiciones invernales frías y difíciles, en cabañas de madera o comunidades aisladas.

Aunque es causada directamente por el aislamiento, la fiebre de cabina puede afectar tanto a individuos como a grupos de personas. El factor clave es el aislamiento de una socialización más amplia y del aire libre.

Cuales son los sintomas 

Quedarse solo en cabañas remotas, hechas a medida o casas móviles personalizadas puede ser un desafío. Esto es válido tanto para personas solteras como para familias y grupos de personas. Es por eso que los especialistas de la salud siempre advierten que hay que estar atentos a los síntomas, para que se puedan dar respuestas adecuadas. Estos síntomas pueden variar entre personas y en su gravedad, pero generalmente incluyen inquietud, impaciencia, estrés constante, agitación y alta irritabilidad. En una espiral descendente, la fiebre de cabina también puede causar letargo, tristeza constante, sensación de desesperanza, disminución de la motivación, desconfianza en los que te rodean y falta de concentración. En una nota más física, la fiebre de cabina también puede afectar el sueño, inducir antojos anormales de alimentos y cambios de peso.

Mientras se aísla, siempre es importante estar atento a estos síntomas, tanto en usted como en quienes lo rodean. Vivir en espacios reducidos sin la posibilidad de abandonar la seguridad de la casa de troncos puede resultar desalentador y afectar gravemente la salud mental. El hecho de que se acerque el invierno y los días se vuelvan más oscuros en el hemisferio norte seguramente traerá aún más desafíos para la salud mental.

Cómo curar la fiebre de cabina

En primer lugar, es importante tener en cuenta que la fiebre de cabina no es una "enfermedad" oficialmente reconocida. Por lo tanto, no existe ningún medicamento o cura estricta para ello. Sin embargo, los psiquiatras de todo el mundo son muy conscientes de los síntomas y los toman muy en serio.

Lo principal es, sin importar cuáles sean las condiciones (a menos que la vida esté en peligro, por supuesto), salir e interactuar con la naturaleza. Esto es especialmente importante para las personas que se aíslan en cabañas de madera hechas a medida y casas de vigas laminadas verdaderamente remotas. Tómese el tiempo para salir todos los días si es posible, incluso para dar un simple paseo. Esto permitirá que tu mente comprenda que no está encerrada por dentro y seguirá funcionando normalmente.

En términos más generales, y para las personas que se encuentran en aislamiento en oficinas y salas de jardín, el consejo es el siguiente: tener una rutina de cada día. Establezca metas por períodos de tiempo y trabaje para lograrlas. Tenga incluso una rutina mínima de ejercicio para todos los días y coma siempre a intervalos regulares. Y por último –y esto es importante para todos– no dejes que tu mente te juegue una mala pasada. Mantén tu cerebro ocupado. Si el trabajo no es suficiente, elija un pasatiempo que requiera desafíos mentales. De esa manera, no se concentrará en la claustrofobia y más bien involucrará a su cerebro en actividades más productivas.

Reflexiones finales

Ya sea en casas con vigas laminadas o en cuartos de jardín, cuídese. La fiebre de cabina es una afección que avanza lentamente. Sin embargo, existen formas relativamente sencillas de mitigarlo. Esta pandemia ha afectado a todas nuestras vidas, incluida Eurodita. Sin embargo, incluso trabajando desde casa, nos hemos alentado a nosotros mismos y a quienes nos rodean a mantenernos seguros, saludables y regresar al trabajo con una mente y un cuerpo sanos y sanos. Esperamos poder ayudar de alguna manera, ya sea con una breve publicación sobre la fiebre de la cabaña o con los planes de una casa de madera laminada para aislarse de manera segura.