El hogar suele ser el entorno ideal para que los niños realicen experimentos científicos, ya que tiene muchas ventajas, como la de poder utilizar espacios libres como el garaje o el cobertizo del jardín.
Estos espacios suelen tener una ventilación adecuada, por lo que es seguro realizar experimentos que generen olores o humos.
Elija un espacio adecuado
Los laboratorios de ciencias caseros pueden proporcionar a sus hijos la exploración práctica que necesitan para comprender mejor los conceptos científicos y fomentar su interés por la investigación. Un laboratorio casero también fomenta el desarrollo de habilidades de pensamiento crítico, además de enseñar una ética de trabajo duro, pero crear un entorno así requiere algo más que simplemente proporcionar espacio; necesitarás equipos y materiales que hagan que los experimentos merezcan la pena.
Selección de un ubicación ideal para su laboratorio puede resultar desalentador cuando se dispone de poco espacio en casa, pero es factible. Un garaje, un cobertizo o un patio edificio de jardín todos hacen conveniente lugares para crear un espacio de laboratorio científico doméstico eficiente si se elige con cuidado. Al seleccionar uno para ti asegúrate de que ofrece espacio suficiente para guardar muebles así como acceso a tomas de corriente para los distintos equipos que puedas utilizar en él.
Si es posible, elige un espacio que sea fácil de mantener limpio. Si utiliza productos químicos que puedan ser tóxicos, asegúrese de que su laboratorio esté situado lejos de alimentos o enseres domésticos que puedan entrar en contacto con estas toxinas. Además, asegúrate de que el espacio dispone de ventilación adecuada que pueda soportar humos de los experimentos, así como los desagradables efectos secundarios de los mismos.
Como tus hijos pueden necesitar numerosos materiales para sus experimentos, también tendrás que tener en cuenta el almacenamiento. Busque una zona que pueda albergar recipientes resistentes a los productos químicos, cubos de almacenamiento o cajones de plástico. Asegúrate de que estén fuera del alcance de los alimentos o de los productos químicos a los que se exponen directamente, y cierra los recipientes con llave para evitar que los niños los abran accidentalmente.
Es posible que sus hijos tengan que realizar varios tipos de experimentos, algunos de los cuales requieren condiciones especiales. Pueden necesitar refrigeración para almacenar líquidos de forma segura o una temperatura ideal para realizar experimentos con calor. También es de vital importancia que dispongan de una zona lo suficientemente grande para alojar equipos como microscopios.
Si es posible, elige un espacio en la planta baja de tu casa o edificio de jardin para almacenaje de grandes aparatos, como frigoríficos. Subir o bajar estos aparatos por las escaleras puede resultar inseguro e incómodo, además de costoso.
Asegúrese de tener acceso a fuentes de electricidad
Los laboratorios científicos caseros son una forma inestimable de fomentar la curiosidad científica e inspirar el amor por el aprendizaje en los niños. Pero con un poco de orientación y creatividad, crear un laboratorio científico doméstico productivo en la construcción de su jardín puede hacer que el aprendizaje resulte atractivo y satisfactorio tanto para los niños como para los padres.
Antes de comprar ningún equipo, tómese su tiempo para calcular exactamente el espacio que necesitará. No olvide los requisitos de almacenamiento a la hora de determinar el tamaño de su laboratorio. Además, asegúrese de que hay suficiente tomas de corriente, ya que algunos equipos requieren electricidad para su funcionamiento; si no hay ninguno cerca, considere la posibilidad de adquirir un cable alargador para aumentar el alcance.
Si es posible, lo ideal es crear tu laboratorio científico casero en una habitación equipada con agua corriente y conexiones de alcantarillado; esto hará que la limpieza después de los experimentos sea mucho más sencilla. De lo contrario, las cocinas pueden servir como laboratorios; asegúrate de proteger las encimeras y las mesas con alfombrillas resistentes a los productos químicos antes de realizar experimentos en ellas. Además, asegúrate de guardar los productos químicos separados de los alimentos.
En casa, también es esencial tener acceso a agua limpia para beber y cocinar, así como una zona para los líquidos de desecho. Preferiblemente, en forma de garrafas de plástico de 5 galones que suelen encontrarse en las neveras de agua, aunque en caso de emergencia pueden bastar botellas de refresco recicladas de 2 litros. Y recuerda tener cerca una papelera para recoger los residuos que se generen durante los experimentos.
Etiquetar los recipientes es una forma fácil y responsable de que los niños se mantengan organizados en su espacio de trabajo, y hará que encontrar lo que necesitan sea mucho más sencillo cuando realicen experimentos. También debe haber una lona o alfombrilla de plástico para proteger las superficies en caso de accidentes que puedan dejar derrames de materiales o líquidos.
Los laboratorios de ciencias caseros pueden ser una forma excelente de que los niños adquieran habilidades esenciales para la vida, desde las matemáticas y la lectura, pasando por la química y la biología, hasta la apreciación de la naturaleza, que aumentará su bienestar mental. Además, esta divertida actividad ofrece a los niños la oportunidad de descubrir más de lo que les rodea mientras se divierten.
Elija el suelo adecuado
La elección del suelo de su laboratorio tendrá un efecto tremendo en su funcionalidad y repercutirá directamente en la forma en que los estudiantes y el personal utilicen este espacio. Desde losetas de moqueta que crean rincones de lectura en aulas de guardería hasta vinilo sin juntas para laboratorios de ciencias, Mannington Commercial ofrece una impresionante gama de opciones de alta calidad para adaptarse todos los entornos de aprendizaje.
Como punto de partida, es una buena idea averiguar qué es lo que más interesa a tus hijos y comprar el equipo y los materiales en consecuencia. Además, piense en qué lugar de la casa debe ubicarse el laboratorio de ciencias.
Si sus hijos están interesados en plantas de exploración, asegúrese de proporcionar una iluminación adecuada para el fototropismo (tendencia de una planta a crecer hacia la luz). Además, las herramientas básicas de jardinería, como vasos de precipitados y probetas graduadas, les ayudarán a aprender sobre los ciclos del agua y la densidad del suelo. Considera también la posibilidad de montar un invernadero para que puedan llevar sus experimentos al exterior.
En función de la edad de sus hijos, también debe considerar cuidadosamente el nivel de supervisión que necesitan. Mientras que los mayores pueden ser capaces de manejar por sí mismos algunos de los ingredientes y equipos más desordenados, los más pequeños necesitarán ayuda durante los experimentos. Es esencial que cualquier laboratorio de ciencias para niños esté situado en un lugar en el que te sientas seguro dejándoles solos durante breves periodos de tiempo.
Las cocinas pueden servir como prácticos laboratorios científicos gracias a su amplio espacio de almacenamiento, superficies de trabajo, electricidad y ventilación. Sin embargo, es importante tener en cuenta que almacenar productos químicos o equipos cerca de alimentos puede ser peligroso; para mayor seguridad, sería prudente guardar estos artículos por separado en una habitación apartada o en el garaje (si se desea) si se utiliza como laboratorio. Si utiliza el garaje como laboratorio, debería adquirir un suelo resistente a los productos químicos para evitar derrames o accidentes en superficies de hormigón.
Asegúrese de contar con el equipo adecuado
Si trabajas con productos químicos y otros materiales potencialmente peligrosos, tu laboratorio debe estar adecuadamente equipado. Esto no significa necesariamente comprar equipos caros; muchos experimentos científicos caseros pueden realizarse con artículos cotidianos que se encuentran en la cocina o el garaje.
Asegúrate de que dispones de suficiente espacio de almacenamiento para mantener los suministros ordenados y organizados. Considera la posibilidad de invertir en algún tipo de cubierta protectora para el suelo (lo ideal es una lona, una esterilla de plástico o una plancha de contrachapado), así como un cubo de basura cerca para poder desechar cualquier material peligroso de forma rápida y segura. También necesitarás un contenedor adecuado (por ejemplo, un cubo o una bañera).
No sólo necesitarás los elementos básicos para realizar experimentos, sino también algunos suministros básicos. El material de química, biología y otras asignaturas para estudiantes es fácil de conseguir tanto a nivel local como en Internet, y puede costar menos que los productos profesionales, aunque produzca resultados similares.
Cuando compre material de laboratorio para niños, tenga en cuenta la edad y el nivel de los que lo van a utilizar. Los alumnos más jóvenes deben evitar todo lo que contenga sustancias químicas peligrosas; mejor centrarse en actividades que fomenten la curiosidad mediante experimentos con elementos naturales como la tierra o el agua.
Los accesorios de laboratorio científico que facilitan el trabajo de los niños pueden hacer que la experiencia les resulte mucho más sencilla, como embudos, vasos de precipitados y otros objetos de cristal que permiten medir, trasvasar o almacenar líquidos. También puede necesitar herramientas para diseccionar animales, crear fluidos no newtonianos como el oobleck y estudiar las propiedades de la materia.
Además, necesitarás otros suministros, como un microscopio y guantes de plástico, así como materiales básicos de manualidades para crear proyectos artísticos. Home Science Tools proporciona todos estos materiales y muchos más.